En un movimiento que sorprendería hasta al más cínico de los conductores, la empresa AUBASA ha decidido que es hora de un incremento monumental en los peajes. En una audiencia pública programada para este lunes 22 de julio, la compañía presentará un esquema de aumentos que superan el 160%, con ajustes automáticos cada tres meses. 

El Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la provincia convocó a esta audiencia, cumpliendo con lo anticipado por el flamante director de AUBASA, José Ramón Arteaga. Se presentarán "los fundamentos técnicos, económicos, financieros y jurídicos" de las nuevas tarifas para los peajes de la Autopista Buenos Aires-La Plata y otras rutas bajo su administración. La novedad es la propuesta de aumentos trimestrales automáticos, que para nada se justifican.

El CVT (que refleja el costo de explotación en este contexto inflacionario) se basa en tres indicadores del INDEC: el Índice de Salarios, el de Precios Internos al por mayor y el de Inflación. Una fórmula que, según AUBASA, asegura que los costos de explotación se mantengan "adecuadamente reflejados". Pero para los automovilistas, esto se traduce en un golpe directo al bolsillo.

A mediados de junio, ya se había anticipado que la propuesta de aumento sería del 157% sobre las tarifas vigentes, redondeando los montos para que todos los valores sean múltiplos de $100. “Estamos muy por debajo”, afirmaba Arteaga a principios de junio, justificando el ajuste necesario por los aumentos en servicios públicos, salarios y costos de mantenimiento.

¿Cuánto costarán los peajes? Según la información obtenida, los peajes de Dock Sud, Hudson, Gutiérrez y Villa Elisa en dirección a La Plata pasarán de $500 y $600 a $1.300 y $1.600 para autos de dos ejes y menos de 2,10 metros de altura, en horarios no pico y pico respectivamente. En sentido inverso, los peajes en Bernal, Quilmes y Berazategui subirán de $900 y $1.100 a $2.200 y $2.800, mientras que en Hudson se incrementarán de $1.000 y $1.200 a $2.600 y $3.200.

Con esta movida, AUBASA no solo pretende alinearse con los tiempos modernos sino también con los precios del espacio exterior. Porque si de algo no se puede acusar a la empresa es de falta de ambición. Así que prepárense, platenses, para un viaje al futuro... con tarifas de otro planeta.