Presentan el libro sobre el recorrido alrededor del mundo arriba de un Renault 18
Guillermo y Julieta están viviendo transitoriamente en La Plata desde hace algunos días, arriba de su Renault 18 “familiar” (Brack) que compraron para recorrer distintos países viajando.
Presentarán el libro sobre su vida y sus viajes, mañana viernes a las 19.30 en la estación de Meridiano V, en la calle 71 y 17.
Se trata de una pareja de jóvenes profesionales que tienen una casa en Córdoba, pero que lejos de estancarse a vivir en un solo lugar, decidieron embarcarse en la aventura de hacer viajes eternos arriba del auto, conociendo lugares nuevos.
Los nenes estudian a través de un método que es a la distancia y sus padres ofician de profesores y maestros en la educación y en la vida misma.
Bajo el lema “porque la vida vuela” (una cuenta en la que publican y muestran sus viajes y aventuras, pero que también resume una forma de entender el paso en esta tierra), esta pareja de jóvenes que tienen dos hijos y a quienes llevaron a recorrer distintos países arriba de una Renault 18 Breack, a la que le anexaron una “casita”, como una especie de carpa en el techo para adosar un dormitorio.
El auto tiene un motor 2.2 litros y consume mucho combustible. Sin embargo, ni siquiera en tiempos en donde la nafta aumenta todos los meses, Juli y Guille detienen sus ganas de viajar, y la próxima meta será cruzar el océano y llegar hasta Sudáfrica.
Este viernes, entre las cosas que hacen para ganarse la vida, estarán presentando el libro sobre su propia historia, en un encuentro que se realizará a las 19.30 en la vieja estación de Meridiano V sobre la calle 71.
Mientras tanto, en una de las tantas paradas transitorios, en este caso en el playón de estacionamiento del Parque Castelli, recibieron a LaMovidaPlatense.com.ar y anticiparon su particular forma de vida.
- ¿Cómo nació la idea de recorrer el mundo arriba de un auto?
- Julieta: Viajamos en dos etapas, cuando éramos pareja/novios hicimos un primer viaje con este auto que sigue siendo nuestro primer auto, nunca lo cambiamos. En esa oportunidad fuimos de Córdoba a Tierra del Fuego y ahí empezamos. Después, decidimos subir por todo el continente hasta Alaska.
- Guillermo: Desde el 2011 al 2014 fue ese viaje. Pasamos por 16 países, recorrimos 7 mil kilómetros. Éramos super jovencitos.
Julieta: Yo recién me recibí de kinesióloga y Guille de profesor de educación física. Fue toda una aventura que la hicimos porque teníamos muchas ganas de conocer, y estuvimos tres años en ese viaje.
Y después de eso volvimos a Córdoba, estuvimos 8 años y luego, en la pandemia, dijimos vamos a salir de viaje de nuevo para mostrarle a nuestros hijos el mundo maravilloso que tenemos. Y ahí nació la frase “porque la vida vuela”.
- ¿Con cuánta plata iniciaron el primer viaje?
Julieta: Al principio teníamos más ganas que ahorros, esos se acabaron en La Quiaca, Jujuy, pero sabíamos que el camino íbamos a buscar la manera de conseguir dinero. Hicimos de todo, talleres de recreación.
Nos presentábamos en las instituciones, en escuelas, y contábamos nuestro viaje, nuestro sueño y la gente se entusiasmaba porque teníamos una linda propuesta.
Pero no siempre se daba eso, entonces vendíamos comida, yo pintaba remeras con el logo del viaje y las vendíamos en ferias. Cosechamos cerezas en Canadá, hicimos un montón de cosas...
La mirada de Julieta se queda perdida en sus recuerdos, feliz.
- ¿Y los nenes dónde nacieron?
En Córdoba, uno en 2015 y el otro en 2018. El mayor empezó a viajar con 7 y el menor con 4 años. El segundo viaje que hicimos lo iniciamos en el 2023.
Ellos estudian en un sistema de educación a distancia, básicamente nosotros somos sus maestros. Este libro que vamos a presentar también nos abre muchas puertas en ferias del libro de lugares donde llegamos.
- ¿El auto es como un hijo más para ustedes?
Si, vivimos para él. Le pusimos un sobrenombre: “el manioso”. Desde el tercer día que lo tenemos le pusimos ese nombre, porque es un auto que tiene más mañas que problemas.
Embarcamos desde México y lo podríamos haber dejado allá, pero lo quisimos traer porque el no nos defraudó, no nos dejó tirados. Tiene motor 2.2, es grande, así que tiene fuerza.