La interna del PRO alcanzó un nuevo pico de tensión cuando Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, denunció que su sector fue víctima de un "golpe de Estado" dentro del partido. La acusación fue dirigida principalmente a Cristian Ritondo, a quien señaló como uno de los responsables del supuesto vaciamiento del PRO en territorio bonaerense.
El conflicto se formalizó este martes, cuando un grupo de diputados provinciales leales a Bullrich anunció la creación de un nuevo bloque en la Legislatura de Buenos Aires, denominado PRO Libertad. Esta movida fue la respuesta a la renuncia masiva de los integrantes del Consejo Directivo partidario en la provincia, lo que Bullrich calificó como un intento de adelantar las elecciones internas y despojarla de su poder: “Les hicieron un golpe de Estado, vaciando el partido”, declaró en Todo Noticias (TN).
Bullrich no dudó en apuntar directamente a Ritondo, aliado de Mauricio Macri, acusándolo de estar detrás de la maniobra: “Estuvo en el tema”. Días antes, Ritondo había sugerido públicamente que Bullrich se uniera a La Libertad Avanza si no estaba conforme con el PRO. En respuesta a las críticas por su acercamiento a sectores libertarios, Bullrich defendió su posición: “Me parece un infantilismo. Yo soy ministra del gabinete del presidente Milei, trabajo para que el cambio se construya todos los días”.
A pesar de la crisis, Bullrich aseguró que el PRO “no se va a romper” y subrayó que las disputas internas son insignificantes en comparación con la misión de cambiar el país. “No discutamos boludeces, no discutamos chiquitajes”, lanzó en clara alusión a las críticas por su participación en un acto con un funcionario de La Libertad Avanza.
Cristian Ritondo no tardó en responder a las acusaciones de Bullrich. Negó rotundamente que haya habido un “golpe de Estado” y justificó las renuncias como una reacción a la falta de representación efectiva en la presidencia del partido a nivel provincial, cargo que ocupa Daniela Reich, senadora provincial y esposa del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, ambos alineados con Bullrich. “Patricia, siendo politóloga me extraña que no sepas la definición de golpe de Estado. En el PRO de la Provincia de Buenos Aires hubo una renuncia masiva de dirigentes porque nadie se sentía representado”, replicó Ritondo en su cuenta de X (anteriormente Twitter).
El enfrentamiento entre Bullrich y Ritondo es solo un capítulo más en la agitada interna del PRO, exacerbada por las recientes alianzas y movimientos estratégicos de cara a las elecciones. Bullrich justificó estos movimientos en el marco de la búsqueda de instrumentos necesarios para acelerar el proceso de transformación del país, mencionando específicamente la Ley Bases como un elemento clave.
Patricia, siendo politóloga me extraña que no sepas la definición de golpe de estado. En el PRO de la Provincia de Buenos Aires hubo una renuncia masiva de dirigentes porque nadie se sentía representado por quien se hizo cargo de la presidencia hace un año. Se llamará a… https://t.co/PRkWrnkgJC
— Cristian Ritondo (@cristianritondo) May 29, 2024
En cuanto a los rumores de espionaje interno, Bullrich negó tener información al respecto y descartó la posibilidad de que el gobierno utilice la inteligencia para espiar a sus propios funcionarios. “Tengo una parte de la inteligencia que es meramente criminal, dedicada a la búsqueda de organizaciones criminales. No creo que haya ocurrido, ¿Qué sentido tiene que un gobierno que quiere generar cambios utilice la inteligencia para espiar a sus propios funcionarios?”, concluyó.
La crisis en el PRO sigue abierta, y mientras Bullrich y Ritondo intercambian acusaciones, el futuro del partido se ve cada vez más incierto. ¿Será capaz el PRO de superar estas divisiones internas y presentarse como una fuerza unida en las próximas elecciones? La respuesta a esta pregunta definirá el rumbo del partido en los meses venideros.
