FIN DEL AMOR | Arde el PJ por durísima interna Cristina-Kicillof: aquí, las dos campanas
El gobernador bonaerense Axel Kicillof se enfrenta a una dura crítica de Cristina Kirchner, quien cuestionó su papel dentro de la interna del Partido Justicialista. La ex mandataria se mostró particularmente severa al señalar su comportamiento.
"Ningún dirigente es víctima. La única víctima en este país es la gente", fue una de las declaraciones más tajantes de Cristina, sugiriendo que Kicillof se estaría victimizando.
Cristina no dejó espacio para la ambigüedad, al reprochar públicamente a Kicillof. Le atribuyó el hecho de que sus ministros buscaran avales en favor de figuras políticas locales. En particular, señaló a Ricardo Quintela, gobernador de La Rioja, como uno de los beneficiados de esas acciones.
Cristina se mostró sorprendida por la postura de Kicillof, comparándola con situaciones del pasado. “¿Alguien se imagina a un ministro de Néstor Kirchner buscando avales para Chiche Duhalde en 2005? ¡Hacete cargo!”, exclamó.
El foco de las críticas de Cristina Kirchner también se centró en el futuro del Partido Justicialista. En su discurso, expresó la necesidad de ampliar el espacio político y no quedarse encerrados en el peronismo tradicional. "Debemos salir a buscar a los jóvenes", declaró.
Cristina subrayó que el peronismo está "a la defensiva" y que es vital recuperar la iniciativa. En su visión, el PJ necesita articulación con otros sectores para convertirse en una verdadera alternativa de gobierno.
Uno de los puntos más debatidos dentro del PJ ha sido la incompatibilidad de ser gobernador y conducir el partido a nivel nacional. Cristina Kirchner fue enfática en su postura de que Ricardo Quintela no debería presentarse como candidato en la elección del partido.
“No podés gobernar una provincia y estar en Buenos Aires al frente del PJ. Es irresponsable”, comentó Cristina, reiterando que la responsabilidad de gestión no puede mezclarse con la política partidaria.
Además de sus comentarios sobre la interna del PJ, Cristina Kirchner dedicó parte de su discurso a hablar sobre la política internacional, un tema que considera crucial para el partido. Criticó la falta de conexión del PJ con el escenario global actual.
Cristina comparó las posibles consecuencias de las próximas elecciones en Estados Unidos y destacó la importancia de tener una visión geopolítica clara. "Si gana Trump, tendremos guerras comerciales. Si gana Kamala, continuarán las guerras convencionales", advirtió.
Cristina Kirchner también dejó un mensaje indirecto a Javier Milei, criticando la política exterior actual del gobierno de Alberto Fernández. En sus palabras, Milei estaría alineándose con los intereses equivocados en el contexto global.
La ex presidenta expresó su preocupación por la falta de una estrategia internacional por parte del gobierno y destacó la necesidad de aprovechar las oportunidades que ofrecen las tensiones geopolíticas para beneficiar a Argentina.
Las declaraciones de Cristina Kirchner llegaron justo después de un llamado a la unidad por parte de Axel Kicillof. El gobernador había pedido reiteradamente "unidad, unidad, unidad" en un acto en Berisso, donde reivindicó las gestiones de la ex presidenta.
Sin embargo, Cristina no respondió con el mismo tono conciliador. Al contrario, su discurso marcó un distanciamiento claro, enviando un mensaje directo a su ex ministro y actual gobernador.
El acto en el que Cristina lanzó estas declaraciones contó con la presencia de diversos sindicalistas, lo que muestra la relevancia de su mensaje dentro del movimiento obrero. Entre los asistentes se encontraban figuras como Vanesa Siley y Héctor Amichetti.
Cristina aprovechó la oportunidad para subrayar la importancia de la movilización sindical y su papel en la reconstrucción del PJ, remarcando que la unidad debe ser una prioridad, pero bajo las condiciones correctas.
La intervención de Cristina Kirchner no dejó margen para interpretaciones ambiguas. Sus palabras fueron claras y contundentes, mostrando su descontento con el rumbo actual de la política interna del PJ y, en particular, con la figura de Axel Kicillof.
Cristina dejó claro que la reconstrucción del PJ pasa por una renovación y una estrategia clara de apertura hacia nuevos sectores, con un foco en los jóvenes y en la internacionalización del partido.
En un tuit redactado con una pluma de factura excelente, clara, contundente y bien peronista, que parece escrito por el propio Arturo Jauretche, Axel Kicillof le contesta a Cristina en un nivel superlativo. Por eso, decidimos publicar el texto completo, a continuación:
Argentina atraviesa una situación muy grave, nuestro pueblo está siendo agredido por un Gobierno Nacional desertor que ataca a la Universidad Pública, destruye los derechos, favorece el saqueo de nuestros recursos, fomenta el odio y reprime salvajemente a los que protestan.
Ahora bien, ¿cómo llegamos hasta acá? Milei no ganó por accidente; es presidente luego de que el peronismo hiciera un gobierno nacional que no cumplió con las expectativas. No solo sufrimos una dura derrota a nivel nacional sino también en muchas provincias. Evidentemente algo no anda bien.
En este contexto, mi principal responsabilidad es proteger a los bonaerenses del ajuste y de los ataques y, en lo que pueda, también al país, construyendo lazos de solidaridad con el resto de los gobernadores de todos los partidos.
Pese a los errores cometidos, el peronismo es la principal fuerza política de la oposición, y la fuerza que deberá liderar una alternativa amplia y democrática al nefasto proyecto que encabezan Milei y Macri.
Tal vez, de manera inoportuna, en un momento donde no deberíamos distraer demasiada energía en internas partidarias, irrumpió una discusión de cara a la presidencia del Partido Justicialista.
Sobre esto, quisiera aclarar algunos puntos:
1. Desde que se apartó a Alberto, repetí en público y en privado que no me interesa disputar la interna del PJ ni directa ni indirectamente.
2. Por razones que me son ajenas, hoy en el Partido Justicialista están a punto de quedar dos listas:
La que encabeza el gobernador Quintela, quien anunció su postulación hace tres meses, y la lista que encabeza Cristina, cuya candidatura dio a conocer diez días atrás a través de un documento donde plantea que en el peronismo no sobra nadie.
Mi deseo y mi posición es que se logre un encuentro, un diálogo, y se evite una innecesaria competencia interna. Ambos proponen dos puntos centrales: nítida oposición a Milei y convocatoria a la unidad.
3. Al mismo tiempo, veo con preocupación que la derecha empieza a aprovecharse de nuestros debates internos.
4. A horas del cierre, vuelvo a expresar mi voluntad: ¡unidad, unidad respetuosa, unidad peronista!
En virtud de los reiterados ataques públicos que se han hecho durante los últimos tiempos, me gustaría agregar algunos comentarios.
Quintela no es mi candidato, es un gobernador y un dirigente que viene enfrentando, con un coraje que no abunda, las políticas de Milei desde una provincia alejada de los medios y las redes porteñas.
Es un error pensar que se trata de un dirigente al que yo “subo o bajo”, pero sobre todo es un gran error atacarlo. La lógica del sometido o traidor es una lógica que entró en crisis y que viene causando malos resultados.
Pareciera que no se registra del todo lo que está pasando en el país y en nuestra fuerza política: hay enojos, diferencias y desacuerdos.
Esos reclamos, esos enojos deben ser escuchados con humildad y de ninguna manera pueden ser descalificados como signos de traición.
Después del fallido proceso del FdT, hay que reinventar una alternativa aprendiendo de lo que falló.
El respeto y el acompañamiento a los pocos gobernadores que pudimos revalidar nuestras gestiones y que damos la batalla contra el plan destructivo de Milei es una pieza indispensable en ese camino, de lo contrario: ¿qué tipo de unidad podría darse en el PJ?
La verdad es que no quiero ni puedo estimular peleas entre compañeros pero tampoco puedo convalidar el equivocado mecanismo de que cualquier diferencia o crítica desate el disciplinamiento.
La única pelea en la que todos los días pongo cuerpo y alma es la pelea contra Milei y sus políticas de exclusión y crueldad.
En esa pelea que me toca afrontar, necesito el pleno acompañamiento del peronismo de mi provincia.
Últimamente sectores de nuestra fuerza política, con quienes a veces tengo diferencias pero también un recorrido común, afecto y coincidencias, han decidido criticarme mucho y acompañarme poco.
Sinceramente, me cuesta entenderlo pero no tuve ni tengo la necesidad de agredir a nadie para expresar el reclamo de un mayor respaldo al gobierno provincial.
Sobre quienes forman parte del gabinete, estoy orgulloso del trabajo que vienen haciendo y que deseo que sigan realizando.
Por favor, encontremos la unidad y dejemos de reproducir metodologías y conductas que nos trajeron hasta acá.
Que nadie espere de mí que libre una guerra interna, la historia no nos lo perdonaría y el futuro tampoco. Cristina está en el corazón del pueblo, también en el mío y no tengo que rendir examen de ese sentimiento.
Con los dirigentes que se oponen a Milei, con la CGT y las dos CTA, con los movimientos sociales, con todas las agrupaciones, con todos los gobernadores e intendentes.
Con toda la militancia; con nuestras diferencias pero sobre todo con nuestro compartido amor por la patria, espero que el Partido Justicialista dedique toda su energía a fortalecer el escudo y la alternativa que tanto necesita nuestro pueblo.
