Estudiantes no pudo aprovechar la chance de descontarles a Racing,. Huracán y Unión, que al cabo de la décima fecha habían dejado puntos en el camino, ya que ninguno pudo ganar durante el fin de semana. En efecto, el Pincha marcó muy mal y dejó demasiadas ventajas para que un alicaído Independiente se termine quedando con la victoria 2 a 0 en el estadio de 1 y 57, cuando hacía cuatro partidos que no podía festejar. 

El Pincha arrancó mejor y tuvo puntos altos en Ascacíbar, Meza y Giménez, pero quedó en deuda con el experimento que ensayó el entrenador poniendo a Nahuen Benedetti por izquierda. 

Enzo Pérez está muy por debajo de habitual nivel, ya no desequilibria, pero tampoco puede armar el juego, y en la defensa Rodríguez está varios escalones por debajo del nivel de sus compañeros. En ese marco, el arquero Mansilla duda entre salir o quedarse en los cornbers, y así llegó el primer gol de la noche, en la parte final del primer tiempo, cuando los defensores dejaron definir con mucha comodidad a Lomónaco en el borde del área chica y Mansilla no respondió. 

En la parte final el Rojo amplió la diferencia con un remate de Avalos y la expulsión de Ascacíbar, que volvió a llegar a destiempo, auque sigue siendo el único que corre y está en todos los sectores de la cancha, le terminaron de facilitrar las cosas al equipo del Avellaneda. 

Independiente vino a cortar la racha a La Plata y lo logró. Estudiantes quedó en deuda con su gente, que en el contexto de una noche gélida, con vientos huracanados y una sensación términa inusual para esta época del año, acompañó y alentó hasta el minuto final.