Dos delincuentes abusaron sexualmente de un joven en pleno Paseo del Bosque

Una madrugada común terminó en terror en el Paseo del Bosque. La historia que sacude a La Plata y reabre la discusión sobre la seguridad en sus espacios más transitados.

10-12-2025 - Por La Movida Platense

El Paseo del Bosque, habitualmente asociado al movimiento estudiantil, a la vida universitaria y a la rutina cultural de La Plata, volvió a quedar bajo una sombra inquietante tras un episodio que reactivó viejas alertas sobre la seguridad en sus senderos internos. En la madrugada del lunes, un joven de 27 años vivió una secuencia de violencia que combinó robo, persecución y un abuso sexual perpetrado por dos delincuentes que aprovecharon la oscuridad y el aislamiento del sector comprendido entre 57 y 115, detrás del tradicional Colegio Albert Thomas.

La víctima regresaba a pie luego de un encuentro social cuando advirtió que dos hombres caminaban detrás de él, imitando su ritmo cada vez que aceleraba. Esa sensación de ser cazado en un espacio que a esa hora suele quedar prácticamente desierto fue el inicio de un recorrido que derivaría en un hecho de extrema crueldad. Los agresores lograron interceptarlo, lo intimidaron y lo obligaron a abandonar el camino principal, empujándolo hacia una zona más profunda del Bosque donde la oscuridad y la falta de tránsito hicieron el resto.

Cuando el joven intentó resistirse, recibió golpes que lo derribaron, y en medio de ese sometimiento los ladrones lo arrastraron para despojarlo de su riñonera. Allí llevaba su celular y su documentación, pero el ataque no terminó allí. Según su denuncia, uno de los hombres, de aproximadamente 35 años, fue quien consumó el abuso sexual mientras el otro vigilaba la escena, reforzando amenazas de muerte para evitar cualquier intento de defensa.

En un instante que definió su supervivencia, el joven —ya casi sin aire— pidió poder incorporarse unos segundos para respirar. Ese mínimo margen le permitió reunir fuerzas, empujar al agresor y escapar descalzo hacia la avenida 60. Desde allí, y todavía en shock, logró llegar hasta la Dirección de Caballería, donde pidió ayuda. Efectivos policiales lo asistieron y lo acompañaron a radicar la denuncia.

La fiscal Cecilia Corfield, a cargo de la UFI N.º 15, desplegó medidas urgentes para intentar identificar a los responsables. Equipos de Policía Científica recorren el área y analizan cámaras ubicadas en accesos y corredores internos. El caso vuelve a poner en primer plano la discusión sobre los puntos ciegos del Bosque, un lugar que durante el día es símbolo de encuentro, pero que durante la noche se transforma en un territorio donde la presencia estatal se vuelve intermitente.

El episodio no solo expone una falla en las políticas de prevención, sino también la fragilidad de quienes transitan espacios públicos en horarios de baja circulación. La crudeza del caso sacude a la comunidad platense e impulsa una reflexión urgente: qué peligros se esconden en los lugares que asumimos cotidianos, y cuánto falta para que caminar por la ciudad deje de ser un acto de riesgo