En un giro sorprendente, el hombre señalado como principal sospechoso del asesinato de Jesús Vera, de 39 años, fue encontrado sin vida en la localidad de San Carlos. El martes, Vera fue tiroteado en el barrio platense de San Carlos en un presunto conflicto originado por una relación previa con la expareja del homicida, identificado como Cristian Altamirano.

Altamirano, quien ya estaba bajo la mira de la policía, había amenazado a la mujer y expresado la intención de quitarse la vida después de cometer el crimen. Ante la denuncia y la protección policial otorgada a la expareja, los investigadores sugieren que Altamirano aceleró su propio desenlace.

La secuencia violenta comenzó con disparos en la zona donde Vera fue mortalmente herido y testigos observaron a Altamirano huir en su auto. La policía descartó el móvil de robo y está explorando posibles conexiones personales o ajuste de cuentas como motivos del crimen.

Horas después, las autoridades confirmaron que Vera se desplazaba en un Chevrolet Corsa Wind gris, que permaneció en la escena del crimen. La investigación sigue en curso, mientras la conmoción se apodera del barrio. Las pericias de la Policía Científica arrojarán luz sobre los detalles del incidente.

La tragedia tomó un giro inesperado cuando el sospechoso Altamirano fue hallado muerto con un disparo en la cabeza en su propio vehículo, un Chevrolet Corsa similar al vinculado con el homicidio. El caso continúa desarrollándose mientras las autoridades desentrañan la compleja trama que llevó a la muerte tanto de la víctima como del presunto agresor.