Se registró un nuevo siniestro ocurrido durante la accidentada noche del sábado y que no terminó en tragedia de milagro. Todo ocurrió en barrio Cementerio, donde una moto embistió a un menor de edad, quien terminó tirado sobre la cinta asfáltica. El conductor del vehículo volvió para asistir al pequeño, que encendió las alarmas de toda la cuadra.
Todo sucedió sobre 77 y 134 en horas de la noche, cuando un grupo de chicos estaba jugando sobre la calle y avistaron que se acercaban dos motos que atentaban contra sus vidas y su diversión, por lo que decidieron resguardarse a un costado de la calle.
En primer lugar, pasó por la cuadra una moto que bajó la velocidad para no lastimar a ninguno de los chicos. Luego, el grupo se distendió y volvieron a sumarse a la calle, corriendo peligro de que el siguiente vehículo los hiera. Paso siguiente, uno de los menores atina a cruzar la calle rápidamente sin mirar con precaución para su izquierda y la moto que venía a una gran velocidad termina intentando esquivar al pequeño, pero de todas formas lo embiste y lo deja tirado en el suelo.
Los padres y amigos que estaban en el lugar salieron asustados a socorrer al chico que quedó tirado en el suelo y el conductor volvió para constatar si el joven tenía alguna herida de gravedad. Finalmente lograron advertir que el chico estaba en buen estado de salud, logró sobrevivir al impacto y luego los padres lo llevaron a una guardia cercana para constatar que esté sano.