La polémica por el cambio de nombre del Puerto La Plata: ¿Un riesgo para su identidad?
El reciente proyecto presentado en la Legislatura bonaerense para modificar el nombre del Puerto La Plata ha desatado una intensa polémica en el Concejo Deliberante de La Plata. La iniciativa, impulsada por la legisladora ensenadense Susana González, propone cambiar el nombre del puerto a "Puerto de la Región Capital de la Ensenada de Barragán". Sin embargo, la oposición, representada por el bloque de concejales de la UCR + PRO, ha expresado un rotundo rechazo.
Los concejales defienden que el nombre actual, Puerto La Plata, refleja la estrecha conexión histórica y simbólica entre el puerto y la ciudad capital de la provincia. Según argumentan, modificarlo podría diluir esa identidad que ha perdurado durante más de un siglo. Además, señalan que este cambio no ha sido respaldado por un consenso social amplio ni por los sectores económicos vinculados al puerto.
El proyecto, que ya ha avanzado en la Cámara de Diputados y ahora se encuentra en el Senado, se basa en una justificación histórica. González argumenta que el puerto actual es sucesor directo del Puerto de la Ensenada de Barragán, con raíces que se remontan al siglo XVII. Sin embargo, los concejales de La Plata sostienen que la modificación no solo generaría confusión, sino que también afectaría la proyección nacional e internacional del puerto como un polo estratégico para el comercio exterior.
Desde una perspectiva crítica, la propuesta refleja un intento de cambio simbólico que podría tener consecuencias más allá de la mera modificación de una nomenclatura. La falta de consenso y la ausencia de una consulta pública sobre el tema son puntos clave que no deben pasarse por alto. Además, el gasto asociado a este "rebranding" y el impacto sobre las relaciones comerciales establecidas podrían ser factores negativos a considerar.