El Concejo Deliberante de La Plata homenajeó este jueves a las Abuelas de Plaza de Mayo y a su presidenta, Estela Barnes de Carlotto, por los 45 años de lucha ininterrumpida en busca de los nietos y nietas apropiados de forma ilegal por las fuerzas represivas durante la última dictadura cívico-militar en nuestro país. "El odio no nos lleva a nada y el amor a todo", aseguró Carlotto al recibir el reconocimiento.
La presidenta de la Abuelas de Plaza de Mayo fue recibida con un reconocimiento por su trayectoria en la sesión de este jueves.
El decreto fue aprobado por los concejales de ambos bloques y fue recibido por la titular de Abuelas, quien se hizo presente en el recinto junto al titular el Espacio para la Memoria Ex Comisaría 5ta, Leonardo Fossati. "Expresar el reconocimiento de este cuerpo a los 45 años de lucha ininterrumpida de las Abuelas de Plaza de Mayo y al impulso de su labor cotidiana, llena de amor y coraje, por la restitución de la identidad de sus nietos y nietas apropiados/as de forma ilegal por las fuerzas represivas durante la última dictadura cívico-militar en nuestro país", reza el expediente sancionado.
Al presentar el homenaje, el concejal del Frente de Todos, Guillermo "Nano" Cara, sostuvo que para el Concejo "es una alegría, un orgullo y un honor" recibir a Carlotto en el recinto. "Nosotros tenemos un orgullo localista de que vos, el rostro más visible del trabajo de tantos años, seas de nuestra ciudad y seas un ejemplo en un momento donde discursos reaccionarios, discursos del odio, parecieran ir ganando terreno en el debate público", señaló el edil y destacó lo que significa "poder recuperar a través tuyo y de tu presencia el significado de la palabra democracia".
Estela de Carlotto, por su parte, agradeció el reconocimiento en medio de un aplauso sostenido y destacó todo lo que falta todavía pese a los 45 años de lucha. "Todavía nos faltan encontrar restos de los desaparecidos y unos 300 nietos", precisó y apuntó que los nietos "van a ser los herederos en la continuidad de la búsqueda de sus hermanos".
"Lo mejor que se puede hacer es hablar desde el amor que uno tiene. Hemos recorrido el mundo buscando ayuda cuando acá sabíamos que, al bajar del avión, nos podían secuestrar. No es que somos mujeres valientes, únicas: somos madres", señaló sobre la lucha de cuatro décadas. Y aclaró: "Voy a caminar con el bastón mientras tenga vida. Nunca nos vamos a arrodillar".
Luego dejó un mensaje a todos los ediles en tiempos de la grieta y de los discursos de odio. "Lo que me interesa es que se siga buscando, que no se olvide. Memoria, verdad y justicia tienen que ser realidad y sobre todo que los argentinos nos sintamos hermanos unos con otros a pesar de que pensemos distintos. Políticamente no somos enemigos. Todos comemos la misma harina, la misma carne, respiramos el mismo aire. Quiere decir que somos argentinos y, de pensar distinto, para eso está la discusión política y la discusión legal", dijo.
Carlotto se refirió entonces al intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Kirchner y aseguró que "no puede volver a pasar" y aseguró que "el odio no lleva a nada". "Tenemos que hermanarnos para no tener miedos a la repetición, lo que estamos viviendo con una expresidenta que ha sido víctima de un casi asesinato. No pensamos nunca que eso podía pasar, no tiene que volver a pasar, entonces a los jóvenes y a los adolescentes hay que mimarlos y enseñarles que la patria se hace de otra manera y no con el odio. El odio no nos lleva a nada y el amor a todo", resaltó.
En este mismo sentido, y en referencia a la actividad deliberativa, aseguró que "no todos piensan igual pero no vienen con revólveres ni con cuchillos. Vienen con el cerebro y el corazón para explicar su pensamiento, esa es la patria que debemos llegar a tener para que no ocurra nada de lo que alguna mala gente. Ya sabemos quiénes son, y cuando se emite un voto se debe saber a quién se vota porque sabemos que quien dirige un país nos dirige a todos y cuando hay maldad no es a todos, es a algunos".
Ya en el final, aseguró estar feliz de estar en el Concejo y de recibir el cariño de la gente. "Esto me quita unos cuantos años no de vida, los 92 los tengo, sino de ánimo. Así que agradezco el juntarnos, el abrazo que les doy a todos sin poder agarrarlos, a todos los que están acá y a los que no vinieron para que un día estemos sin estos sillones vacíos y que todos compartan lo que todos quieren: la libertad de hablar y el querernos como hermanos. Ese es el mensaje que quiero dejarles junto con el gracias", aseguró en referencia a las tres concejalas de Juntos (Romina Marascio, Carla Fernández y Belén Muñoz) quienes no se hicieron presentes en el momento del homenaje.
