A pesar del empate ante Argentinos Juniors en UNO, Eduardo Domínguez dejó claro que la mente de Estudiantes está puesta en la final de la próxima semana. En su conferencia de prensa, no escatimó en elogios para el rendimiento del equipo durante el año, calificándolo como "uno de los mejores del país", pero rápidamente redirigió el foco hacia lo que viene.

Al ser consultado sobre su futuro en el club, el técnico no dudó en expresar su postura. "Me siento cómodo y quiero seguir", dijo, aunque fue tajante al aclarar que aún no firmó su renovación de contrato, lo que mantiene la incertidumbre sobre su continuidad. Domínguez dejó en claro que no hablaría de su futuro hasta que se concretara el acuerdo, lo que evidencia la tensión propia de un final de ciclo.

En cuanto a las inversiones de Foster Gillett, el nuevo socio de Estudiantes, el entrenador evitó profundizar en el tema. "Pregúntenle a la dirigencia", indicó, dejando claro que no es él quien tiene respuestas sobre el futuro económico del club. En este sentido, su postura de mantener la calma y priorizar el presente refleja el compromiso con el equipo y su enfoque en el desafío inmediato.

El contexto de incertidumbre sobre su futuro no opaca el excelente momento del equipo, pero sí introduce una dosis de expectativa en los próximos días. Mientras tanto, Domínguez sigue demostrando liderazgo al poner todo su esfuerzo en la final que se avecina, un desafío crucial para la institución.