El presidente Javier Milei implementó un extenso decreto de necesidad y urgencia (DNU) el pasado 29 de diciembre, buscando desregular la economía argentina. Aunque la norma enfrenta obstáculos judiciales y deberá pasar por el Congreso, ya está en vigencia y sus efectos se sienten en la vida diaria de los argentinos.
El DNU derogó la Ley de Alquileres, permitiendo contratos en moneda local o extranjera, y estableciendo una duración de dos años si no hay plazo acordado. Esto generó un aumento del 9% interanual en la oferta de alquileres en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
El control estatal sobre las cuotas de medicina prepaga fue eliminado, permitiendo que las empresas establezcan precios diferenciales según franjas etarias con una variación máxima de tres veces. Esto llevó a aumentos del 40%, y se espera otro incremento en febrero.
Se derogaron la Ley de Abastecimiento, la Ley de Góndolas y el Observatorio de Precios. La desregulación en el sector de consumo masivo llevó a un aumento del 31.5% en diciembre en categorías como alimentos y bebidas.
El DNU modificó la Ley de Tarjetas de Crédito, reduciendo el poder de sanción del Banco Central y liberando comisiones y punitorios por incumplimiento. Se estableció una tasa de interés del 140.86% anual para operaciones de crédito.
La derogación de la Ley N° 19.030 permitió una "política de cielos abiertos". Empresas low cost como JetSmart, Flybondi, Paranair y GOL ampliarán rutas en Argentina y países limítrofes, marcando un cambio significativo en la competencia del sector aéreo.
Se derogaron leyes vinculadas al turismo, eliminando lo que el Gobierno considera "monopolio de agencias de viajes". La medida enfrenta resistencia de la Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (Faevyt), que presentó un amparo.
El recibo de sueldo experimentará cambios, con descuentos que el empleador no podrá realizar sin autorización expresa. El período de prueba se extendió de 3 a 8 meses, se redujeron indemnizaciones por despido y se creó un fondo de cese laboral.
El DNU, que refleja la visión del presidente Milei sobre la economía, genera debate y preocupación en distintos sectores de la sociedad argentina. La incertidumbre sobre su impacto a largo plazo persiste, mientras la medida enfrenta desafíos legales y busca la aprobación del Congreso.