En una movida que hasta el Perón se sorprendería, la Municipalidad de La Plata se mandó un laburo que dejó todo de cacería. Se clavaron varias obras que están transformando las calles en pistas de carrera y dándole al tráfico un respiro que los vecinos no se esperaban.
Julio Garro, el jefe de la movida, tiró el lance: "¡Mirá vo'! Le estamos dando un lavado de cara a la ciudad con obras que están haciendo que los vecinos se tiren un asado de festejo". Y no exagera el tipo, porque ya tienen más de diez obras finalizadas y unas cuantas en marcha, ¡una locura total!
Una de las bombas es la avenida 501, que va a ser el deleite de los pibes de Gorina, Hernández, San Carlos y Romero. A fin de año quieren pegarle a los 200 kilómetros de asfalto, y no están jodiendo. Ya están en pleno laburo en la avenida 501 entre 131 y 155, y tienen todo listo: asfalto, cañerías, luces LED y hasta una pavimentación de hormigón que da vuelta como camión de carga en una curva.
Ahí no para la cosa, ¡sigue en caliente! La avenida 155 está en la mira, con una repavimentación que le va a dar una cara nueva a la zona. Y ni hablemos de la avenida 131, que va a ser la envidia de Hernández y Gonnet. Hicieron de todo ahí: asfalto, cordones, dársenas para colectivos y hasta semáforos nuevos.
Y no para, ¡seguimos con el quilombo! Agarraron la avenida 32 y le metieron doble calzada de hormigón con rampas, veredas y luces LED. Entre nosotros, quedó más pulenta que la casa de la abuela.
No podían faltar las calles del barrio, ¡y les entraron a full! La 208 entre 520 y 32 ahora es un sueño, y la 7 entre 44 y 60 se puso tan linda que más de uno va a querer pasar la noche ahí.
La 173 entre 44 y 520 es otra joyita, un puentecito de seis metros para que los autos pasen de lo más pancho. Y en la 137 de 32 a 520 se mandaron un ensanche para que las traffic no choquen a dos por tres.
Pero ojo, no se piensen que solo las grandes avenidas se llevan el premio. ¡Las callecitas también la rompen! La 144 entre 467 y 446, la 28 bis y 29 de 458 a 429, la 22 de 70 a 82, todas quedaron como un pincelazo.
En definitiva, la Municipalidad de La Plata está dejando la ciudad de primera. Y el intendente Garro lo sabe: "Cuando las calles están bien, todo fluye. Los vecinos están más contentos que nene con chupetín". Así que, ¡a disfrutar del pavimento nuevo, que esto va en serio!