Un repaso sobre las primeras construcciones de la ciudad

“Hemos dado a la nueva capital el nombre del río magnífico que la baña, y depositamos bajo esta piedra, esperando que aquí queden sepultadas para siempre, las rivalidades, los odios, los rencores, y todas las pasiones que han retardado por tanto tiempo la prosperidad de nuestro país” La frase que salió de la boca del fundador en el momento del acto.

Los encargados de las primeras obras fundacionales fueron los albañiles italianos que además, fueron algunos de los habitantes más tempranos. En 1883, cuando la ciudad sólo tenía un año, comenzaron con el Palacio Municipal.

Un año después, en 1884, pudieron instalarse los poderes públicos de la Provincia de forma definitiva en la capital de Buenos Aires como estaba previsto desde un principio por las autoridades.

En 1885, apareció la primera línea de tranvía a caballo la cual era propiedad de Manuel Giménez. En un principio, la formación hacía un recorrido de 16 kilómetros en total y llegaba hasta Ensenada.

La Plata se convirtió en ser la primera ciudad de Sudamérica en tener el servicio de alumbrado eléctrico allá por el mes de abril de 1886. La empresa encargada de proveer la electricidad era Brush Electric Company.

Solo 5 años después de la fundación, apareció el primer club platense. El 3 de junio de 1887, se fundó el Club de Gimnasia y Esgrima La Plata en el cual en ese momento, sólo se llevaban a cabo las actividades que aparecen en su nombre.

Poco después, el 20 y 24 de agosto, inauguraron los servicios de telefonía y telegrafía para que puedan comunicarse de mejor manera con los vecinos de Buenos Aires y Ensenada. Este fue uno de los avances tecnológicos más importantes.

Este gran año terminó con la construcción del Teatro Argentino en manos del arquitecto italiano Leopoldo Rocchi. 5 años después abrió sus puertas, y en el aniversario de 1990 se inauguró con la obra de Otello de Giuseppe Verdi.

El 8 de noviembre de 1892, se empezó a ensayar con el tranvía eléctrico el cual sólo iba por la Avenida 7, se 45 a 50. Aunque La Plata también fue la pionera sudamericana en contar con esto, el proyecto no prosperó de la mejor manera por la desconfianza de los vecinos a la hora de utilizarlo.

Para terminar con lo que tuvo lugar en el siglo XIX, el senador Rafael Hernández, en 1897, fundó la Universidad Nacional de La Plata la cual en 1905, el doctor Joaquín Víctor González, la nacionalizaría.