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Municipios bonaerenses reviven polémica tasa vial para enfrentar crisis económica

Varios municipios de la provincia de Buenos Aires reviven la controversial medida de gravar la compra de combustibles con una tasa vial, una estrategia utilizada años atrás por intendentes del Frente Renovador. La movida busca mejorar las recaudaciones ante la crisis económica y la caída en el cobro de otras tasas.

Desde diciembre de 2023 hasta marzo de 2024, al menos cuatro distritos han implementado este tributo, coincidiendo con las políticas de ajuste de Javier Milei, que afectan tanto a provincias como a municipios.

Mar del Plata, Pehuajó, Pilar y Almirante Brown ya aplican esta tasa, mientras que Quilmes y Berazategui evalúan hacer lo mismo. La medida ha generado debate y polémica en las redes sociales.

El objetivo de estos gravámenes es financiar el mantenimiento de la infraestructura vial municipal, aunque su legalidad ha sido cuestionada y judicializada en varios casos.

Esta no es la primera vez que se implementa la tasa vial en municipios bonaerenses. Algunas ciudades ya la aplican desde hace años, como Tigre, Ituzaingó, General Rodríguez, Merlo, San Fernando, San Isidro y Vicente López, entre otras.

La medida, que busca aumentar la recaudación local, ha sido criticada por algunos sectores y ha generado controversia en el ámbito político y empresarial.