Cuota simple: ¿El Gobierno impulsa el consumo a costa de los comercios con una tasa del 50% anual?

El Gobierno ha decidido extender el programa de financiación al consumo denominado "Cuota Simple" hasta el 31 de diciembre, según lo adelantado por Infobae este jueves. Esta renovación incluye 35 rubros, 29 de los cuales ya existían y se suman 6 nuevos. La tasa nominal anual se mantiene en un 50%, y los comercios tendrán la posibilidad de ofrecer pagos en 3, 6, 9 y 12 cuotas. La resolución correspondiente fue publicada en el Boletín Oficial este viernes, entrando en vigor de inmediato.

El objetivo de esta medida, tanto desde el Gobierno como desde los empresarios, es ampliar la oferta de financiación a plazos más largos. En muchos casos, los comercios se comprometen a absorber el costo financiero para ofrecer pagos "sin interés", manteniendo el mismo precio que en pagos al contado.

Si bien el Gobierno planeaba inicialmente ampliar los plazos de financiación, especialmente para rubros con precios más elevados, la decisión final fue extender los beneficios a todos los rubros, ya que el Banco Central no subsidiará más las tasas de interés. Aunque esta contribución será privada, la Secretaría de Comercio mantendrá su intervención para garantizar tasas más bajas que las del mercado, favoreciendo así el consumo en un contexto económico desafiante.

A pesar de la tasa nominal anual del 50%, que puede parecer alta en comparación con otras tasas de interés, sigue siendo más baja que las tasas de préstamos personales o de financiación con tarjetas. Esto convierte al programa en una opción atractiva para los consumidores, especialmente si los comercios absorben el costo financiero.

El Gobierno reconoce que el año 2024 será recesivo y busca impulsar el consumo para evitar un empeoramiento de la situación económica. Sin embargo, también es consciente de que ya no habrá subsidio de tasa por parte del Banco Central, lo que evitará costos adicionales para la entidad. Aunque algunos sectores temían que la ampliación de los plazos pudiera afectar la lucha contra la inflación, desde la Secretaría de Comercio argumentan que la capacidad ociosa actual permite evitar un aumento de los precios.