Política

VIDEOS | El exterminio silencioso de EDELAP en La Plata

Los barrios de La Plata vienen sufriendo la falta de electricidad desde hace una semana, de manera casi constante y despiadada. La prestadora del servicio energético local sigue mostrando su macabra ineficiencia y miles de vecinos lo pagan con su salud y la de sus electrodomésticos.

Cortes salvajes de 12 horas (en el mejor de los casos), en pleno horario pico y con 36 grados, marcan porqué el termómetro social tiene las luces rojas encendidas y el ruido de las alarmas enloquece a las autoridades políticas encargadas de regular las prestaciones de Edelap

Lo que dejan estos cortes son personas al borde la muerte por golpes de calor, presión arterial y otras dolencias, sobre todo en casos de población bulnerable, que cada día es mayor en cantidad. Cuando padecen enfermedades, de cualquier tipo, los ciudadanos quedan expuestas ante la falta de este servicio escencial.

Una de las vecinas se rompió el dedo de un pie cuando se levantó a las 3 de la mañana a oscuras, ahogada por el calor, y se chocó un mueble.


Concretamente, con la ausencia del servicio eléctrico en medio de estas temperaturas atroces, se amplifican hasta límites insospechados los daños de las enfermedades preexistentes y se adquieren nuevas afecciones. Los cuerpos funcionan mal y quedan expuestos a todo tipo de padecimientos.

 

Los reclamos a EDELAP llegan desde todos los barrios (más de mil) ubicados en cada una de las 23 localidades que componen el Partido de La Plata. Quienes viven en Abasto, City Bell, El Peligro, Gorina, Olmos, La Plata Casco, Los Hornos, Gonnet, Romero, Ringuelet, Tolosa, Villa Elvira, Villa Elisa, Altos de San Lorenzo, Etcheverry, Arana,  Seguí, Villa Garibaldi, Villa Montoro y Sicardi, son los más afectados.


Rogelio Pagano, el dueño de la exterminadora


Luis Pablo Rogelio Pagano, conocido como Rogelio Pagano es presidente y dueño del Grupo DESA, controlante de las cuatro principales empresas distribuidoras de electricidad de la provincia de Buenos Aires (Edea, Edelap, Eden y Edes), que concentran el 65% del total del mercado provincial, y Edesa, la empresa que provee electricidad a la provincia de Salta.? En 2002 fue contratado por Marcelo Mindlin.

En 2014 Pagano deja el Grupo Mindlin y adquiere Desarrolladora Energética SA (DESA).

En los dos años siguientes a la elección de Mauricio Macri como presidente de la Nación y María Eugenia Vidal como gobernadora de PBA, DESA compró las cuatro empresas en que había sido dividido el servicio de distribución eléctrica de PBA.

Se trata de Eden (norte y centro), Edes (sur), Edelap (La Plata y alrededores) y Edea (Costa Atlántica y centro).? Simultáneamente DESA compró EDESA, la empresa eléctrica de la provincia de Salta.?


Campesinos y pequeños productores movilizaron contra Edelap


Desde la Multisectorial Campesina recalamaron por el aumento indiscriminado de la tarifa eléctrica, y planifican más acciones en la Municipalidad y la Provincia por tierras y seguridad en el cordón florifrutihortícola de la región

La Multisectorial Campesina, integrada por productores del cordón florifrutihortícola de La Plata, llevó adelante una manifestación frente a EDELAP, exigiendo soluciones ante las elevadas tarifas eléctricas que afectan a los pequeños productores.

Las boletas de luz que están llegando a los pequeños productores son algo imposible de pagar, hasta $1 millón”, denunció Isabel Palomo, integrante de la Agrupación 25 de Mayo, en una nota en la muy buena Radio Estación Sur.

Lo que vamos a pedir es una tarifa para el pequeño productor, porque cualquier cosa cobran. Capaz el productor estuvo un mes sin regar y la boleta le sigue llegando igual que la anterior” explicó.

Sin embargo, no es un reclamo solo por energía, ya que no hay políticas públicas que respalden a los productores: “No hay nada que el Estado nos respalde, las tierras productivas están siendo loteadas para barrios privados y las inmobiliarias suben los alquileres de manera desmedida”.


Tierra y seguridad: un pedido urgente


El conflicto por la tierra es otro de los puntos críticos para los productores. “Queremos que el productor pueda comprar la tierra que trabaja, no que se la regalen, pero el Estado tiene que acompañar”, planteó.

Nosotros nunca fuimos a querer ni tomar tierra porque no corresponde ni tampoco que les regalen. El productor pide comprar la tierra, pero el Estado tiene que acompañar” indicó Palomo.

En cuanto a la posibilidad de una Ley de Tierras Provincial, dijo: “Parece que está muy, muy encajonada, no se mueve, no hay respuesta como positiva para nosotros”.

Mientras tanto, los desarrollos privados se multiplican en las localidades de Olmos, Abasto, Echeverri, la Colonia Urquiza, Banderita, City, Bell, Los Porteños, El Peligro y El Pato, enumeró Palomo, y remarcó que son “todos los barrios que históricamente han sido tierra productiva”.

Todos los días vemos una nueva quinta nivelada por máquinas para hacer barrios privados. Nos da mucha bronca porque producimos alimentos, no countries”.


Inseguridad y abandono


La inseguridad en las quintas agrava aún más la situación. Según Palomo, los robos son constantes: “Hace poco entraron 12 ladrones tirando tiros. Te roban todo, desde herramientas hasta dinero, dejando todo patas para arriba. Los niños quedan muy asustados”.

Dónde vamos a producir si cada vez más lejos se está yendo la gente a producir a lugares donde no hay ni siquiera escuelas para los chicos”, se quejó la productora y remarcó que además “son lugares donde no es buena la tierra, un año puede producir y al año ya está mala la tierra”.

A esto se suma el abandono del Estado, con zonas “oscuras, llenas de basurales y pasto más alto que un árbol. Nos sentimos abandonados, pero queremos dialogar para que entiendan por qué reclamamos”, concluyó Palomo.