La ciudad bonaerense volvió a sufrir las consecuencias de una tormenta intensa. Entre la falta de obras, la acumulación de residuos y el cambio climático, los platenses se preguntan hasta cuándo tendrán que vivir con el fantasma de las inundaciones.
Las lluvias torrenciales azotaron La Plata, dejando un saldo de calles anegadas, autos flotando y miles de vecinos con agua en sus casas. La furia del temporal revive una pregunta que atormenta a la ciudad desde hace décadas: ¿por qué La Plata se inunda siempre?
Las causas son multifacéticas. Por un lado, la ciudad está emplazada sobre arroyos entubados que, cuando llueve mucho, no dan abasto. A esto se suma la falta de mantenimiento de los desagües, la acumulación de basura y la expansión urbana en zonas de riesgo.
El cambio climático también juega un papel crucial. Las tormentas cada vez son más intensas y descargan mayor cantidad de agua en menos tiempo. Las obras hidráulicas realizadas, aunque necesarias, no son suficientes para contener la furia de la naturaleza.
Mientras tanto, los vecinos de La Plata viven con el miedo a cada tormenta. La "Gestión integral de Riesgo" implementada por la Municipalidad aún no ha logrado mitigar el impacto de las inundaciones.
Expertos coinciden en que se necesita una inversión millonaria en obras, complementada con medidas de prevención y concientización. La pregunta es: ¿cuándo se tomarán las medidas necesarias para que La Plata deje de ser una ciudad anegada?